El ejemplo de Brasil: Jorge Lanata
septiembre 22, 2011
Noy soy de publicar artículos de otras personas, pero dado el momento y el muy buen análisis de Jorge Lanata comparando las realidades de Brasil y de nuestro país, no podía dejar de compartirlo: Lo hice en Twitter, Google+ y un amigo lo publicó en Facebook.
No importa el medio por el que les llegue, lo importante es que nos permita reflexionar… LA CORRUPCIÓN NO DEBE TOLERARSE NI ACEPATARSE BAJO NINGUNA CIRCUNSTANCIA…
Ahí va…
«La corrupción es como el ruido del aire acondicionado: sólo la escuchamos al principio; después nos acostumbramos a él. El problema son nuestros vecinos, que a veces dejan en evidencia lo acostumbrados que estamos: mientras el gobierno argentino persigue a la prensa “hegemónica” y aceita su aparato de propaganda, el brasileño obliga a renunciar a un quinto ministro en sus primeros diez meses de gestión, a partir de investigaciones publicadas por los medios locales.
Dilma Rousseff ha asegurado que la faxina (limpieza) recién comienza: entre 2002 y 2008, la corrupción le costó a Brasil el equivalente a la economía de Bolivia: 23.500 millones de dólares según un estudio de la Fundación Getulio Vargas. Pedro Novais, ministro de Turismo, debió renunciar a partir de una nota publicada por la Folha de Sao Paulo: contrató una mucama y un chofer para su esposa con dinero público mientras fue miembro del Congreso, entre 2003 y 2010. Antes había sido acusado de pagar como gasto oficial su estancia en un hotel. La cruzada de Dilma comenzó con Antonio Palocci, ex jefe de gabinete, a seis meses de su asunción.
Una investigación periodística reveló que Palocci había multiplicado por veinte su patrimonio entre 2006 y 2010, período en el que fue diputado federal, dueño de la consultora Projeto y jefe de campaña de Rousseff. El ministro de Transporte, Alfredo Nascimento, fue denunciado por la revista Veja debido a fraudes en licitaciones públicas, y días después el semanario Istoé divulgó un video en el que aparece junto a un diputado negociando la licitación de una carretera.
También la Folha dio en el blanco con otro ministro: el de Agricultura, Wagner Rossi, por haber transformado la Compañía Nacional de Abastecimiento, una empresa estatal, en una vidriera para acomodar a familiares de líderes políticos del PMDB, aliado del gobierno: aumentó el número de asesores especiales de 6 a 26, y creó 21 nuevos cargos de esa categoría. Cualquier apresurado diría que la distancia entre Argentina y Brasil es de unos dos mil kilómetros. No es esa. Queda mucho más lejos».
Fuente: Diario Perfil