La experiencia de Pasión Redonda
enero 21, 2010
Para los que no lo saben, Pasión Redonda es mi blog de fútbol.
Me parece realmente válido, a esta altura, contar la experiencia que tuve con el mismo, entendiendo que los tiempos cambian y que actualmente, ya no le puedo dar la prioridad que le otorgaba 4 años atrás…
La historia comienza en septiembre de 2005, cuando a punto de recibirme, ideamos con 2 amigos la apertura de un sitio futbolístico impulsados por la PASIÓN que tenemos por este maravilloso deporte y también, por qué no decirlo, por la moda de los blogs, que explotaba de sobremanera por aquel año…
Todo comenzó fantásticamente, aprendimos mucho acerca de la blogósfera y estábamos entusiasmadísimos. El mundial de Alemania se acercaba y con el comienzo de 2006, nuestras visitas crecían exponencialmente. Yo, recién recibido y desocupado, tenía tiempo y ganas para dedicarle al blog y uno de mis amigos (la otra persona que aportaba sus opiniones en la página), al ser un fanático de la escritura y al tener tiempo porque estaba todavía estudiando, se sentía en su salsa… Tanto es así que una noche antes del estreno y después de haber tomado un poco de más, recorrió raudamente los pisos de su edifcio dejando innumerables volantes por debajo de las puertas…
Nos complementábamos de maravilla hasta que surgió el primer problema, el amigo del que les estaba hablando (lo conozco desde los 4 años) empezó a dejarse llevar por la IMPACIENCIA. Si bien al comenzar con el proyecto no pensábamos casi para nada en el dinero, al ver que teníamos posibilidades de obtener utilidades gracias a Ad Sense (sistema de publicidad contextual de Google) y a las crecientes visitas, el panorama era alentador. Inmediatamente le dije que esperara, que con el Mundial seguramente ganaríamos algo, pero no me hizo caso y abandonó la escritura momentáneamente.
Así fue que en junio de 2006, Pasión Redonda explotó definitivamente. Apariciones como recomendado en La Voz del Interior y en La Nación contribuyeron en demasía. Económicamente, ese mes saqué para mí sólo alrededor de U$S 500 con Ad Sense. Mi amigo, se lo perdió, pero no estoy para nada enojado con él. De hecho, al día de hoy es mi mejor amigo y nos conocemos de toda una vida. Pese a que somos algo diferentes, coincidimos en muchos valores y eso es lo verdaderamente importante. Le juega en contra que para los emprendimientos es demasiado inestable y eso ha complicado excesivamente algunas de sus decisiones. Lo valedero: Es una gran persona.
Después de la cita futbolística por excelencia se produjo un bajón totalmente esperado, así y todo el blog siguió dentro de sus carriles normales. Pasaron la Copa América de Venezuela y los Juegos Olímpicos de Beijing, pero las prioridades empezaban a cambiar y las obligaciones a crecer. Además, la persona encargada de la parte técnica ya no mostraba compromiso y daba paso a la apertura de las hostilidades. Un pequeño problema demoraba días y semanas en solucionarse y todo se complicaba aún más. Hasta que en marzo de 2009 me harté, dije basta y di por terminada la experiencia comercial de la página.
Para mí contra, el dominio estaba a su nombre, así que pasionredonda.com no existiría más. Después de pensarlo durante un tiempo, decidí reabrir el blog con otro dominio: pasionredonda.org , solamente para continuar recreando el hobbie futbolero y escribir de lo que tenga ganas, sin obligaciones ni presiones.
Indefectiblemente, Pasión terminará con el Mundial de Sudáfrica. Lo único que me mueve para continuar hasta esa fecha es poder mostrarles el día de mañana a mis futuros hijos, lo que su papá escribió de los mundiales y todo lo que le gusta y le seguirá gustando el fútbol.
Hoy mi vida pasa por el management, la consultoría y la docencia. Les dejo el fútbol a los periodistas deportivos. Como lo dije anteriormente, las prioridades son otras y me estoy dedicando de lleno a mi profesión, no sin reconocer que la aventura de Pasión Redonda fue gratificante y sublime.
Para terminar, dejo algunos tips derivados de esta experiencia:
Sabíamos que el poner en marcha un blog de fútbol no iba a cambiar para nada la situación económica de ninguno de los tres, era un hobbie, pero hasta para una afición, siempre debemos exigir el compromiso de nuestros socios y compañeros, mucho más cuando es una empresa en serio y con patrimonios económicos en juego.
No asociarse con personas que no tengan nuestros mismos valores. Como lo dice Fernando Trías de Bes en «El libro negro del emprendedor»: De sus socios va a conocer todas sus miserias, así que tienen que ser personas que compartan algo fundamental: su misma escala de valores… Honestidad por encima de capacidades técnicas e intelectuales. Por encima de cualquier otra consideración. En fin, a veces mejor sólo que mal acompañado…
enero 26, 2010 at 1:08 am
Excelente, Estanislao. Pasión Redonda es y será siempre recordado, pero los tiempos cambian y las obligaciones, responsabilidades, afinidades y gustos por las cosas, también, y se adaptan a cada paso de la vida.
Adelante.
junio 26, 2010 at 5:34 pm
[…] 26, 2010 Algunos lectores de este espacio conocerán acerca de mi gran pasión por el fútbol… Por ello, con el objetivo de relajarnos un poco y disfrutar del Mundial de Sudáfrica […]