Los días 8 y 9 de noviembre pasados estuve en la ciudad de Salta dictando el curso referente a Empresas Familiares. Solamente debo agradecer al Consejo Profesional de Ciencias Económicas  por la atención recibida y por estar continuamente en todos los detalles.

Un gran porcentaje del público presente descubrió la existencia de herramientas para profesionalizar a la Empresa Familiar y para propiciar la continuidad eficiente de la misma. Los asistentes pudieron evacuar dudas, imbuirse en los conflictos emocionales que pueden suscitarse en las familias empresarias y conocer más acerca del Protocolo.

Más allá de todo esto y contento con el resultado de la Capacitación, asumo que apoximadamente un 80% de las Empresas Familiares argentinas no tienen ni idea de la existencia del Protocolo Familiar. Para dar un ejemplo, casi nadie de los presentes en Salta conocía de que se trataba este último.

Esto es lo que acontece en todo el país, por ello la necesidad de pasar a la acción se hace imperante. Recuerden que solamente el 10 % de las EF llegan a la tercera generación. ¡Hay que luchar contra esta mortalidad excesiva!

¡Gracias Salta por el interés, por la participación demostrada y por todas sus inquietudes! Una gran experiencia…