Paulo Hartung: El peor negociador del mundo
febrero 10, 2017
Me conmueve demasiado lo que está pasando en el Estado de Espíritu Santo en Brasil, ya que visité su capital Vitória dos veces (2012 y 2015) y la pasé excelentemente bien en ambas oportunidades.
La Policía Militar entró en paro porque no hay forma de que puedan acceder a un reajuste salarial desde hace 7 años. Los gobernantes, bien gracias, hasta se ríen de los reclamos.
Resultado: Tierra de nadie, robos, asesinatos.
Se acuerdan de lo que pasó en Córdoba el 3 de diciembre de 2013 por la total impericia de Cristina y de De la Sota. Es lo mismo pero quizás peor. Una parte del pueblo sin valores que les roba a sus hermanos. Algo que es tónica en Brasil y en Argentina.
Lo peor de la cuestión es la descorazonada reacción del gobierno del Estado, a cargo de Paulo Hartung, quien seguramente no tenga conocimiento alguno de lo que representan las técnicas de negociación colaborativas.
En lugar de separar las personas del problema, ahondar en los intereses de la policía y sus familiares (las mujeres de estos últimos son las que negocian ya que los policías están acuartelados porque ellos no tienen derecho a reclamo), buscar y proponer opciones creativas y basarse en criterios objetivos, el gobierno insiste en culpar y demonizar a la contraparte, instiga a la población contra ellos y se lava total y ferozmente las manos. Ahora los quiere procesar por desacato, elevando así la escalada violenta en la negociación.
Mi experiencia «Mundial». Belo Horizonte
agosto 4, 2014
Aun no puedo creerlo del todo… Debo revelar con mucha satisfacción, que estuve presente en una Copa del Mundo. No lo llamo cumplir un sueño, porque los sueños son otros, pero sí puedo decir que me di un gran gusto… Probablemente, uno de los más significativos de mi existencia (hasta este momento).
Desde el año 2007 que pensaba que no me podía perder un Mundial en Brasil. BRASIL, un país que tantas veces visité y por el que tengo una sensación de cariño indescriptible.
Desde que volví de Vitória en 2012, sabía que lo que se venía era el evento futbolístico por excelencia. En Agosto del año pasado (antes que comenzara a venderse el primer remanente de entradas) ya estaba como un poseso buscando todo tipo de información. Aparecieron amigos que estaban igual de entusiasmados pero que después no se animaron a pegar el gran salto… Hace falta que te etiquete CT…
Finalmente decidí el destino y gracias a Dios no me equivoqué… Belo Horizonte aparecía en el mapa… «BH não tem mar, mas tem bar» reza la leyenda… ¡Qué decir! Me llevo recuerdos increíbles de esta ciudad. La calidez de su gente, la belleza de sus paisajes…
La forma de ser del mineiro es extraordinaria, son simpáticos y prestativos en todo momento y lugar.
El ambiente de una Copa del Mundo es único por donde se lo mire. Te cruzás con gente de todos los países. Argelinos, iraníes, belgas, franceses, estadounidenses, japoneses, colombianos, chilenos, mexicanos. ¡El amor por el fútbol se eleva a lo supremo!
Fui a ver dos partidos (los tengo grabados a fuego), Bélgica-Argelia el martes 17 de junio y Argentina-Irán el sábado 21.
Párrafo aparte para el sistema de transporte que puso el municipio de la ciudad (los «Terminal Copa»). La cola era interminable… Gente grande, chicos chiquitos parados casi dos horas hasta llegar al Mineirão. Mejoras radicales en la organización hubiesen sido deseables.
Ahora, el estadio y el paisaje que lo rodea por fuera… Impresionantes… La «Lagoa de Pampulha» y la «Igreja São Francisco de Assis» (una genialidad de Oscar Niemeyer) merecen toda la admiración posible.
¿Qué me queda? Días lindos e imprevisibles, museos admirables (Circuito Cultural Praça da Liberdade), interminables anécdotas.
Algunas de estas últimas:
Un fernet que se me reventó en el bolso que me hizo vivir 3 días con casi nada de ropa.
El notable agradecimiento de Washington (taxista que me llevó al hotel apenas pisé suelo belohorizontino) cuando le regalé una moneda de 10 centavos argentinos de «lembrança».
La recorrida desesperada por el centro de la ciudad el viernes 20 a la tarde con Joyce buscando la camiseta del América. Inconseguible, parecía que estabas intentando encontrar petróleo. Al final, terminé comprando una del Cruzeiro después del partido de Argentina.
El veterano amigo de Cóppola que estaba en el hotel y que creía que se las sabía todas.
La nota que me hicieron en el Mineirão para el Diario «El Litoral» de Santa Fe por estar con la camiseta de Gimnasia de Jujuy.
En fin, faltan varias, pero se haría larguísimo el post. Disfruté mucho. Salir en medio de la fecha más cargada de trabajo y tomar 4 aviones de ida y 4 de vuelta, bien valieron la pena.
Se viene Rusia 2018, parada obligada.
Anoche, por ejemplo, me costaba dormirme. Le di play a los últimos minutos de Argentina-Irán. Reviví aquel gol del mejor jugador que jamás haya pisado un campo de juego. En la agonía, en la desesperación… Caí en el sueño con una sonrisa interminable.
Mis vacaciones en Vitória
febrero 18, 2012
Como ya es un hecho, en el blog estoy hablando un poco de todo. De mi trabajo, mis expectativas y de alguna u otra cosa relacionada con mi vida personal…
Justamente, paso por acá para contarles que hace una semana, retorné de mis vacaciones en Vitória, estado de Espírito Santo en Brasil. ¿Dónde es eso se preguntarán?… No los culpo….
La realidad es que buscaba un destino en el que pudiera ejercitar mi portugués con creces, por lo que cumplí totalmente con mi cometido y hasta me sorprendí con los resultados. En los primeros días me costó asimilar un poquito el sotaque capixaba* pero después le agarré la mano. Pasar un poquito más de una semana hablando y pensando en otro idioma es una experiencia totalmente recomendable para cualquiera que busque un desafío renovador. Ahora, vuelvo a tener certeza de que todos los cursos que hice valieron sobradamente la pena.
En fin, me topé con una ciudad admirable que cuenta con habitantes muy simpáticos y prestativos para brindar todo tipo de ayuda y responder a pedidos de informaciones. Todo esta cerca y se puede recorrer caminando si uno tiene disposición (salvo casos en los que es estrictamente necesario utilizar algún medio de transporte). Se puede comer muy bien y con porciones generosas en todos los lugares que ofrecen comida por kilo (un plato rebosante de comida solo algunas veces superaba los 10 reales) y disfrutar de bellísimos paisajes y playas muy particulares.
Verdaderamente, quedé impresionado con la vista del puente que une a Vitória con la vecina Vila Velha y con la Ilha do Bói (una isla con playas de aguas muy tranquilas y poco oleaje, casi como si fuera una pileta). Subiendo para esta última, se puede divisar un paisaje totalmente motivador, plasmado de una belleza que siempre recordaré… Según me dijeron, algunas de las propiedades que están bordeando la Isla oscilan de los 5 millones de reales para arriba… Imaginen…
Lo que es impresionante de asimilar también es el contraste entre la playa de la Curva da Jurema y la Ilha do Bói. Separadas por escasos metros, el final de la Curva da pie al comienzo de las casas de la Ilha, podemos ver una diferencia de clases bastante notoria, el llamado povão contra los playboys e patricinhas de la Isla. Frecuentar la Curva en determinadas horas puede ser muy peligroso, y para llegar a la isla, solo caminando o en auto, no hay transporte público los fines de semana (para evitar visitantes no deseados). En fin, una realidad muy frecuente en Latinoamérica que se vive en muchas ciudades de nuestro continente. Eso sí, ambos respetan los espacios del otro y no se inmiscuyen en sus realidades. Esto es bueno y es malo a la vez, depende de como se lo mire…
Vitória es muy poco difundida por las autoridades turísticas brasileras y después de haberla pasado tan bien allá, me da un poco de pena. Es una ciudad muy linda que merece ser visitada. Las playas, el Triángulo de las Bermudas en Praia do Canto (todos los bares y boliches llenos los fines de semana a la noche), el residencial barrio de Jardim da Penha, la Rua da Lama, el Shopping… Les recomiendo que se lleguen…
Para los que no buscan el tradicional viaje a Brasil, léase Buzios, Balneario Camboriú o Florianópolis (lugares llenísimos de argentinos) es una opción sumamente valedera…
Agradezco enormemente a Rodrigo, su novia Cintya y a sus amigos que se portaron muy bien conmigo y me hicieron conocer muchos lugares y también a Mariana y a Julia de Couchsurfing, con quienes compartí lindos momentos.
Anímense a viajar y busquen un lugar que los motive… El mundo es muy grande para conformarnos siempre con los destinos clásicos.
Si tienen la posibilidad, aprovechen…
*Sotaque capixaba: Forma de hablar propia de la región (tonada).